En el marco de la decimoquinta versión de SANFIC, tuvimos el agrado de poder participar abiertamente en los eventos organizados, lo que me dio la posibilidad de poder elegir obras cinematográficas para ver, de las cuales seleccioné “La tercera esposa” (The third wife), película producida en Vietnam y ambientada en la zona rural de este país durante el siglo XIX.

El largometraje fue dirigido por Ashleigh Mayfair y protagonizado por Nguyen Phuong Tra My.

La sinopsis nos refleja una gran historia:

“En el Vietnam rural del siglo XIX, la joven May, de 14 años, se convierte en la tercera esposa del adinerado hacendado Hung. Pronto aprenderá que solo puede mejorar su posición reafirmándose como una mujer capaz de dar a luz a un varón. Cuando se queda embarazada, las esperanzas que tiene May de ascender en la escala social se convierten en una tentadora posibilidad. Enfrentada al amor prohibido y a sus devastadoras consecuencias, May finalmente comienza a aceptar la brutal verdad: sus opciones son escasas y limitadas“.

El filme nos adentra velozmente en lo que será la trama, sin mucho preámbulo previo al embarazo de la joven protagonista, además de presentar al resto de los personajes en tan solo 5 minutos transcurridos de la cinta, lo cual le da fluidez pero también inconsistencia, que, obviamente, se disipa con el paso de los fotogramas.

Sin duda, los mayores aciertos son la banda sonora, en manos de An Ton That, y la fotografía de Chananun Chotrungroj, las cuales ayudan a entregar la tonalidad de escenas que parecían lo más común del mundo, como es el caso de la primera menstruación, hasta el punto de algo tan trágico como perder un bebé. En cada situación presentada, la construcción de escenas nos entregaba una visión abstracta de lo que se nos mostró segundos antes, remitiendo el mismo mensaje de forma distinta.

Pero además de esos factores que logran subir el nivel de esta obra a una merecedora de premios (2018: Festival de Toronto – Mejor película Asiática y Festival de San Sebastián – Premio TVE – Otra Mirada), hay que destacar la magnífica narración de la historia.

The third wife es una película en la que los diálogos se ausentan por grandes tramos de tiempo en los 100 minutos de extensión que tiene esta obra audiovisual y, aunque pueda parecer extraño, no son necesarios. Cada actriz y actor logra emitir un sin fin de mensajes con sus interpretaciones, llegando al punto en el que uno se cuestiona si era necesario incluir dialogo en algunas tomas.

Para mí, esta fue una experiencia bastante nueva y gratificante, debido a mi afición a las películas de acción, suspenso y terror (no quiere decir que no vea estas películas de vez en cuando, pero siempre me desvío más por los estilos ya mencionados), pero, aún así, con este largometraje llegué a sentir una tensión y una emoción gigante ante una historia real de hace dos siglos atrás, sin la necesidad de algún efecto especial ni grandes tomas de acción, sino contando sólo con una buena historia y un aún mejor elenco.

“La Tercera Esposa” es una película que recomiendo totalmente.