Es normal. Si eres artista, y más aún actriz (o actor) que no te sientas del todo cómodo en terrenos tradicionales, conservadores y que suelen ser más bien rígidos. Pero lo que no es desgraciadamente normal en un medio como el chileno es ser avasallador (a) y tener la capacidad y la audacia de transmitirlo, transformarlo en un sello y que precisamente la industria tradicional, de alguna forma, te sea indiferente.
Es necesario saber pelearla, ser aguerrido y entender que es un camino largo pero satisfactorio. Precisamente, si hay alguien que lo entendió fue Geraldine Neary (Instagram dindi_jane), de 31 años, que ha diversificado sus opciones profesionales, destacándose rápidamente y sumándose a una camada de actrices que se vislumbra como el gran recambio de la tv, las tablas y el cine chileno.
La actriz, que próximamente aparecerá en la serie La Jauría (TVN/Netflix), inició su carrera en televisión con un papel importante en la teleserie Matriarcas, producción en la que encarnó a Amalia Castillo, una joven sensible pero de gran carácter, permitiéndole desarrollar un personaje que logró fugazmente llamar la atención por la gran cantidad de registros que era capaz de llevar a cabo, siempre manteniéndose centrada en lo que la historia central le pedía a su personaje.
Esta aparición, como dije, con gran velocidad llamaría la atención por la versatilidad de registros, pero también por la gran capacidad de adaptación que permitió que tempranamente diera un salto en su corta carrera televisiva, cruzando la vereda y pasando a la teleserie de Canal 13, Preciosas.
En la producción del excanal católico interpretaría a Gabriela Martínez, hermana de Lorena Martínez (Loreto Aravena), la protagonista. En este rol, que aunque secundario, también demostraría su capacidad actoral, acomodándose a un papel desarrollado en un contexto dramático diferente, el cual sería predominantemente marcado por una historia centrada en que las prófugas no fuesen encontradas, entre ellas su hermana ficticia además de una incipiente relación amorosa con uno de los familiares de los verdaderos culpables del delito que servía de leimotiv de la teleserie.
Más allá de las tablas
Como suele ocurrir, además de la actuación en diferentes plataformas, Geraldine incursiona exitosamente en la música y cómo no hacerlo en el género de moda: el trap. Sin embargo, esta no es cualquier propuesta musical, sino que además de tener concordancia con los tiempos musicales que corren, dota a esta forma de expresión artística de un fondo, de un mensaje y de una intención. Más precisamente hablamos de Furia, el segundo single de su primer EP.
La principal característica de esta canción, además de su contenido, es su videoclip, pieza la cual fue rodada durante la marcha del 8M del año pasado, causando gran impacto en redes sociales por la temática de la canción y el contexto el cual fue filmado, entregando a la pieza en su conjunto una fuerza digna de su nombre, esclareciendo con firmeza sus intenciones y mostrando a Geraldine como una artista de convicciones, sólida y determinada a hacer mostrar lo que ella cree y siente.
Dindi Jane, Geraldine, es más que una joven y promisoria actriz, también es rupturista, directa y capaz de decir y expresar lo que crea conveniente a través de su arte y sus capacidades, casi sin importar la plataforma que se le presente por delante.
