“Por ruidos molestos” Carabineros arribó al Hotel W en la comuna de Las Condes, Santiago, lugar donde fue encontrada una fiesta clandestina al interior de un departamento en el recinto, no respetándose el aforo máximo de personas permitido en Fase 2. Dentro de este grupo de 8 personas se encontraba la cantante chilena Camila Gallardo, más conocida simplemente como CAMI.

La fiesta clandestina fue confirmada por el alcalde de la comuna, Joaquín Lavín, a través de Twitter, mencionando que algunos asistentes intentaron esconderse en el baño de la habitación para no ser detectados. Situación ratificada por la Fiscalía Norte de la capital.

Según comunicó la policía, las 8 personas fueron conducidas a la 17ª Comisaría de Las Condes y luego quedaron apercibidas. Además, se les cursó un sumario sanitario a todos los presentes, pero no pasarán a control de detención, siendo dejados en libertad, a la espera de una citación.

Cabe recordar que, incluso, Camila Gallardo en una entrevista con Culto de La Tercera aseguró que ella “no tomaba, no carreteaba y que cuidaba su voz porque quería más”, algo que se contradice con los hechos de esta madrugada.

Las disculpas de Camila Gallardo

“Quiero no solo asumir mi error, sino también disculparme por haber transgredido las medidas del Plan Paso a Paso”, partió diciendo un comunicado de la cantante en redes sociales.

Luego, comentó la reunión denunciada: “El sábado excepcionalmente invité a comer a amigos a la terraza de mi departamento, al aire libre. Esta invitación, por cierto, la extendí luego de haberme realizado un PCR que salió negativo el día martes. A la comida invité a siete personas, pero desde principios de enero el aforo máximo es de grupos de 5. Por último, quiero aclarar que en ningún caso esta reunión fue de carácter clandestino ni realizado con el objetivo de transgredir alguna norma”.

En esa línea, dijo que “entiendo que al ser una persona pública se me exige un mayor compromiso en mis actitudes así como en el cumplimiento de las medidas y normativa legales”.

“Quiero aclarar también que esto no volverá a ocurrir y que jamás fue realizado con el afán de saltarse alguna norma dictada por el Ministerio de Salud”, culminó.