Alejandra Dueñas Santander (44), la Jani Dueñas. Del underground del stand-up, la masividad del Club de la Comedia, pasando por sus destacadas participaciones y trabajos en la locución, Netflix, la radio y, por sobre todo, 31 minutos. Hoy da el paso al frente al gran escenario de Chile: el Festival de Viña del Mar.
Con una formación personal (es hija del fallecido locutor Abraham Dueñas) y profesional ligada a las comunicaciones (es actriz), se ha destacado por pulular por diferentes escenarios y contextos. Siempre desafiante, no ha temido durante su trayectoria incursionar en estructuras escénicas –de todo tipo- donde se le permita ser ella misma, hacer lo que le gusta y posicionar su arte como manera de vida y de pensamiento.
Reconocida como una de las propulsoras del stand-up, género al cual le dio vida desde una posición totalmente alternativa, no solo se quedó con lo que fue Sociedad de Comediantes Anónimos, sino que evolucionó a la creación de su propia identidad humorística, en la cual, a pesar de usar ciertos clichés como la menciones políticas y contingentes, también sabe expandir los lugares donde su humor es capaz de reconocer sucesos que afectan a hombres, mujeres y ciudadanos en general.
Sí, Jani Dueñas es feminista y hace humor de la reivindicación, pero al mismo tiempo no planfetea, logrando romper esa lupa excesivamente dura con la que el humor realizado por mujeres se analiza.
No solo de feminismo vive el humor de Dueñas Santander, sino que además abarca y analiza, más bien también ríe de otras temáticas importantes, retratando a un Chile de ayer y de hoy en forma audaz y directo, con gracia especial.
Directa y sin tapujos a la hora de decir lo que piensa, Jani Dueñas ha desarrollado un humor, hace años considerado como irreverente y rebelde, que ha podido surcar los espacios del tiempo y espacio, traspasando la vida de actriz tradicional a una mujer del espectáculo, de la política y de la creación de un nuevo país.
Jani Dueñas dará hoy un paso al frente en cuanto a la masividad –a pesar de ser uno de los comediantes que fue elegido en nuestro país por Netflix para un show que hoy puede verse en la plataforma y la revista Times como uno de los diez mejores stand-up de la plataforma– de un espectáculo que lleva humor pero también lleva realidad.
Cotidianidad, franqueza, que no olvida su máxima de la presentación artística, del show y de la espectáculo. Siempre con una humildad nata, Jani ha construido una carrera a pulso pero que también ha contado con la gracia particular de elegir dónde, cómo y con quién crear. Hoy seremos testigos de todos esos pasos que Jani Dueñas ha dado –siempre con la presencia de su padre como un pilar inamovible- que culminarán en un ¡Gaviota para Jani Dueñas!
