No hay comentarios

Reseña | ‘Cometierra’, de Dolores Reyes: Exponer la herida al sol, aunque duela

Dice Cometierra:

<<Me acosté en el suelo, sin abrir los ojos. Había aprendido que de esa oscuridad nacían formas. Traté de verlas y de no pensar en nada más, ni siquiera en el dolor que me llegaba desde la panza. Nada, salvo un brillo que miré con toda atención hasta que se transformó en dos ojos negros. Y de apoco, como si la hubiera fabricado la noche, vi la cara de María, los hombros, el pelo que nacía de la oscuridad más profunda que había visto en mi vida>>.

“Cometierra” es la primera novela de la escritora argentina Dolores Reyes (Editorial Sigilo), la cual cuenta la historia de una chica clarividente, que cuando pequeña traga tierra enterándose a través de una visión que su papá es el femicida de su madre.

https://www.instagram.com/p/CEuhpltgVW_/

La autora nació en Buenos Aires, en 1978. Es docente, feminista, activista de izquierda y madre de siete hijos. Estudió Letras Clásicas en la Universidad de Buenos Aires. En la actualidad, vive en Pablo Podestá, provincia de Buenos Aires. Y, por cierto, “Cometierra” es su primera novela.

A esta novela llegué gracias a publicaciones en Instagram de la escritora Daniela Catrileo (autora de “Piñen”), y por los comentarios realizados por un amigo sobre el libro en la misma red social. De esta obra me llamó automáticamente la atención la foto de su portada: un fondo negro con una chica con la piel morada, de cuyos ojos brotan cascadas de lágrimas, rodeada de flores, botellas, cigarros y ese nombre tan particular. “Este debe ser un libro oscuro, ¿qué historia esconderá?” -pensé-.

Cometierra de Dolores Reyes - Latam Noticias

Entre birra, Playstation, música, tierra, ratis y madres desesperadas, transita el escenario de esta novela, situada en Pablo Podestá, una barriada pobre que rodea a la capital argentina, muy distinta a la ciudad a pesar de estar a solo unos pocos kilómetros. Cometierra y su hermano, el Walter, viven solos en una casa precaria, donde se enfrentan a la persecución de la verdad, al descubrimiento de la clarividencia, del amor, del sexo y de la protección entre hermanxs, amigxs y amores.

Los personajes de esta novela son entrañables, son jóvenes con mucho humor, se ríen a pesar de la compleja situación de abandono, no son víctimas de su historia, a ratos lo pasan bien, se acompañan, y nos sumergen en los paisajes que habitan; pasajes, ferias y fiestas que nos presentan postales muy similares a las de un barrios de la periferia santiaguina.

Esto me parece llamativo, porque a pesar de estar escrita con los modismos correspondientes a su territorio, se puede seguir la conversación de los chiques sin problema, y tiene referencias tan cercanas, que es un libro que podría estar sucediendo en este preciso momento, en Pablo Podestá en Buenos Aires, o en la Pincoya, en Santiago de Chile, al ritmo del <Cri – cri – minal >> de Ozuna (el negrito ojos claros).

<<Empezaba a ver que los que buscaban a una persona tienen algo, una marca cerca de los ojos, de la boca, la mezcla de dolor, de bronca, de fuerza, de espera, hecha cuerpo. Algo roto, en donde vive el que no vuelve>>.

Uno de los temas que cruza esta novela es la CLARIVIDENCIA con casos de mujeres desaparecidas. El rumor de la joven clarividente (Cometierra) corre rápido en el barrio, llegando multitudes de gritos de auxilio que salen de su territorio. Su casa se llena de botellas con tierra, fotografías, números de teléfonos y nombres de mujeres que se resisten al olvido.

https://www.instagram.com/p/CD3sxrpgJEd/

La protagonista, para llegar a las visionen come tierra (de ahí su apodo); cuando la tierra llega a su estómago, con ella llegan visiones de los cuerpos desaparecidos que la habían pisado. Y así puede saber qué les pasó, cuánto sufrieron y dónde están.

Producto de este revelación, Cometierra desarrolla una curiosa relación con la “yuta”, particularmente con Ezequiel, quien se ve necesitado de su conocimiento mágico para dar con su prima desaparecida, y con quien establece una amistad, a pesar de las contradicciones que le genera su trabajo en el cuerpo de policía.

Precisamente estas escenas y secuencias de búsquedas, son las que llenan el libro de misterio, de terror, de intriga, de dolor y de ternura, de resistencia a la vida en el amor. De la necesidad de dar con las mujeres que faltan.

<<Yo me parezco a María. En los labios, en el pelo, en el color de mi piel está la tierra y está ella: unos ojos que son, para mí un puntazo en la carne. No voy a dejar que quede ahí, viva y abandonada entre sombras>>.

Esta es una novela donde las principales víctimas son las mujeres”, esboza la contratapa del libro. Y así es, pero ¿qué pasa con las mujeres y con los cuerpos feminizados (homosexuales, transexuales, entre otres)? Cae doble condena y se percibe cada vez que Cometierra camina sola de noche o se halla sola en casa, la latencia de una violación o de un femicidio siempre se hace presente en el relato.

Y ¿qué es una violación? <<Es un acto moral, moralizador. El sujeto violador es el sujeto moral por excelencia y la violación moraliza, es decir, coloca a la mujer y a los cuerpos feminizados en su lugar, la atrapa en su cuerpo, le dice: más que persona, eres un cuerpo>>, menciona la antropóloga feminista, Rita Segato, cuyo pensamiento inspiro a Las Tesis en su conocida canción “Un violador en tu camino”.

Dado esto, es importante que la violencia de género comience a ser condenada y visibilizada en la literatura contemporánea. Y este libro lo concreta, sin caer necesariamente en lo punitivo, ni en el morbo, ni en la espectacularización de los cuerpos.

Dolores Reyes es capaz de mostrar las heridas profundas que deja en las sobrevivientes y en sus cercanos esta terrible experiencia de dominación, de dolor. Y esto tiene un gran valor, sobre todo en un país como Argentina que se enfrenta a un asesinato de una niña o adolescente cada 9 días por un femicida, así lo reveló un informe de la Corte Suprema sustentado en fallos judiciales de los años 2017, 2018 y 2019.

Un número no tan lejano a lo que muestra la realidad chilena con la creciente violencia de género, sobre todo en tiempos de pandemia.

Dolores Reyes y la historia de Cometierra, la mujer que tiene el don de  saber dónde están los seres queridos que faltan - Infobae
Tatuaje de Dolores Reyes, (Crédito: Santiago Saferstein)

Para finalizar, compartirles que esta novela me sorprendió gratamente, me hizo transitar por un abanico de emociones a las cuales hace tiempo no me enfrentaba con un libro. Me reí, me dio pena, me excité, sentí miedo y me llenó el corazón de esperanza.

Cada vez somos más mujeres escribiendo sobre los mandatos de dolor que tanto tiempo el patriarcado ha querido mantener oculta. Es hora de sacar la herida al sol, aunque duela. Trabajar con ella es el camino que nos queda para poder cicatrizarla y transfigurarla en fuerza colectiva, para seguir luchando contra la pandemia de la violencia de genero, de la cual aún no encontramos cura.

“Educar a niños no violadores en el futuro es el mayor desafío que tenemos como padres”, consagra Dolores Reyes.

¿Dónde encontrar el libro?:

https://www.instagram.com/p/B6iVMiupzHJ/

***

Big Sur: Acercando la lectura a Chile

Big Sur es una compañía de servicios editoriales cuyo objetivo es acercar la mejor literatura en nuestro idioma a los lectores. Representan a más de cuarenta sellos editoriales, literarios e infantiles, provenientes de distintos rincones de Hispanoamérica: Argentina, Chile, Uruguay, Venezuela, México y España.

Big Sur distribuye a la editorial Sigilo en Chile y, hasta ahora, hay stock del libro en: Buscalibre, Contrapunto, Librería del GAM, Libros Chevengur, Catalonia, Nueva Altamira, BROS, Qué Leo Providencia, Metales Pesados, Catálogo (V Región), Que Leo Valparaíso (V Región), y Librística (Los Andes).

Pagina web: https://big-sur.net/conoce-big-sur/

Etiquetas: , , , , , , , , , ,

Más publicaciones similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Rellena este campo
Rellena este campo
Por favor, introduce una dirección de correo electrónico válida.
Tienes que aprobar los términos para continuar