The Beatles es una de las bandas más representativa de los años 60, tanto así que hoy existen muchas agrupaciones tributo continuando el legado que dejó el cuarteto de Liverpool. Un claro ejemplo es Beatlemania, con su fundador Mario Olguín, quienes ya llevan cerca de tres décadas imitándolos.
Sin embargo, para entender bien este fenómeno, debemos devolvernos muchos años, cuando una banda de jóvenes estudiantes empezaban a llamar la atención en las calles inglesas,en una época dominada por el rock and roll, la Guerra Fría y una competencia férrea en la música anglosajona.
El cantante y compositor John Lennon, había creado el grupo The Quarrymen junto a algunos compañeros de la escuela; Len Garry (bajo de cofre de té), Eric Griffiths (guitarra) yJohn Lowe (piano).
Su sonido era skiffle, una variante altamente muy rítmica, inspirada en la música folk y country estadounidense, proponiéndose junto con los demás integrantes, el intento de incluir tantas canciones de rock & roll como pudo en su repertorio.
Entre música y giras, un 06 de febrero de 1958, Paul McCartney presentó a George Harrison, en ese entonces un chico universitario de tan solo 17 años. No obstante, Lennon tenían sus dudas ante la muy corta edad de George, pero este ultimo lo impresionó en una audición improvisada en un autobús descapotable de dos pisos tocando para John Lennon la canción “Raunchy” de Bill Justis, un tema instrumental lanzado por el sello Sun Records de Estados Unidos, donde músicos de la talla de Elvis Presley, Johnny Cash, Carl Perkins o Roy Orbison, grabaron un single en más de una ocasión con este sello discografico.
Con la integración definitiva de George Harrison al grupo, estos últimos ya estaban tratando de reforzar su sonido, para ese entonces el público adolescente de Inglaterra empezaba a estar mucho más interesado en el auténtico rock & roll estadounidense.
Para el otoño de 1959, The Quarrymen se había transformado en un trío, ahora llamado Johnny & the Moondogs, nombre con el cual acudirían al show de talentos para la televisión local de Carroll Lewis, “Search for a Star“.
Ya en 1960 se sumarían Stuart Sutcliffe en el bajo, amigo intimo de John Lennon y Tommy Moore, baterista temporal. Hacía falta un cambio de nombre y de imagen para construirse un buen destino, así que en mayo lo cambiaron por The Silver Beetles, que luego se convertiría en The Beatles definitivamente, el inicio de una leyenda de la música.