Desde marzo de 2020 nuestras vidas han cambiado radicalmente. Pasamos de repletar calles en búsqueda de la banalidad de la compra a estar encerrados por meses, con teletrabajo y una serie de disminuciones de eventos deportivos y, sobre todo, los culturales, con más de 300 teatros e innumerables salas de cine que se han mantenido cerrados, mermando a esta área de la cultura. Lo mismo pasa con circos, músicos y equipos técnicos. Pero otra área afectada por los embates del Covid-19 ha sido el mundo de la fotografía independiente.
Los fotógrafos independientes han debido ver cancelados sus compromisos con modelos, actores, actrices, matrimonios y eventos variados. Hoy no son reconocidos por el Estado en su faceta de trabajadores del arte, por ende su desprotección ha sido gigante durante estos ya nueve meses de pandemia, que pareciera tampoco tener un final cercano.
Incluso, hay que mencionar que en Chile existió una Asociación de Fotógrafos Independientes (AFI) que tuvo una permanencia entre 1981 y 1990, en plena dictadura de Augusto Pinochet, la cual reunió a más de 300 miembros. Pero que con la asunción de Patricio Aylwin en el retorno de la democracia, la AFI se disolvió definitivamente.
No sabemos qué hacer…
“Tenía muchos proyectos confirmados que, tanto por mi parte como por la de los clientes, hemos pensado que lo mejor es retrasar las sesiones hasta que todo vuelva a la normalidad… no sabemos qué hacer”.
Felipe Morgado, fotógrafo chileno independiente, dice que esa es la frase que más se ha repetido durante estos meses. No hay seguridad para generar gran cantidad de sesiones.
Por otra parte, si bien los diagnósticos son claros y en general todos los fotógrafos coinciden en que la imposibilidad de poder generar sesiones, ya sea con marcas o con personas individuales, les ha repercutido negativamente en su quehacer, las expectativas para el 2021 son algo mejores.
Dominik Soto (Instagram: domi_149km), fotógrafo y panelista del programa web “Sobremesa”, destacó la importancia de las artes, la cultura y la historia en el desarrollo de las sociedades y el rol preponderante que ha tenido durante esta pandemia.
“Espero que este próximo año sea uno en donde ojalá la gente pueda darse el tiempo de apreciar el arte y la cultura en general, sé que es mucho pedir quizás, pero la historia, la cultura y el arte son pilares fundamentales para una sociedad despierta y educada”, enfatizó.
Respecto a las expectativas de la fotografía independiente y a las complicaciones derivadas de la pandemia para su labor artística, el fotógrafo chileno, Felipe Celis (Instagram: celis.photo_), agregó: “Uno de los grandes desafíos es buscar clientes en periodos de pandemia, es el momento de las redes sociales, ese es el lugar para explorar, que lo que espero, por lo menos para mí, es poder trabajar con varias marcas, ya sea fotografía de productos o retratos y en el trabajo más personal poder mejorar en las ediciones para poder expresar mejor lo que mis ojos ven”.
Respecto a los desafíos de la industria, se espera que una vez normalizada la situación sanitaria, los fotógrafos pronto puedan regresar a los estudios, las sesiones sean masivas y la situación se regularice con prontitud.
Desafíos de la fotografía independiente: a un click del futuro
Las a estas alturas mal llamadas “nuevas tecnologías” (porque ya están hace tiempo) se han convertido en un vehículo más para las comunicaciones y, como tal, la fotografía ha podido masificarse y permitido el crecimiento exponencial de los fotógrafos independientes. Hoy se ha democratizado la visibilidad de su trabajo.
En esta misma senda, el propio Dominick Soto, fotógrafo independiente, menciona cuales él cree son los principales cambios y desafíos de su rubro de cara al futuro: “Con respecto a los cambios en la fotografía independiente, creo que las redes sociales han sido las responsables, tanto para bien como para mal, de que la fotografía tenga más exposición y sobre todo en estos tiempos”.
Asimismo, Soto cuenta que la sobrexposición y la gran oleada de nuevos fotógrafos, tiene sus contras.
“Quizás un cambio negativo podría ser que esa misma exposición tan beneficiosos que nos dan las redes sociales puede ser un arma de doble filo, ya que somos muchos y si no sobresales te pierdes pero esa es la gracia o ¿no? El desafío.”
“Los desafíos de la fotografía en general son muchos desde los aspectos técnicos que conlleva el saber usar un cámara, el conocer cómo se comporta la luz y cómo calibrar ambas cosas hasta la necesidad de conocer sobre arte, sus estilos, su historia y cómo la fotografía se mezcla en otros aspecto de la vida misma”, cerró Dominik Soto.
