Con sólo tres puntos, el anteproyecto constitucional para una nueva carta Magna en Chile habló de la cultura y los derechos de esta.
Esta semana se dio a conocer la copia final del texto constitucional que fue redactado por expertas y expertos durante tres meses, donde se incluyen 14 capítulos, 211 artículos y 134 páginas, y en el cual deberán trabajar 50 consejeros elegidos para crear una nueva Constitución para Chile, con plazo de entrega el 7 de noviembre de 2023.
Desde las primeras horas de publicación, el anteproyecto generó diversas críticas desde el oficialismo, la Comisión Chilena de Derechos Humanos e incluso del cineasta y primer presidente del Consejo Constitucional, Miguel Littin.
Pero ¿está incluido el mundo de la cultura en este texto? Sí, en el segundo capítulo nombrado “Derechos y libertades fundamentales, garantías y deberes constitucionales”, artículo 16 “La constitución asegura a todas las personas”, inciso 24 “El derecho a la cultura”.
En el anteproyecto elaborado por la comisión de expertos aparecen tres puntos que involucran al estado chileno y la cultura, donde dice textualmente:
A) El estado resguarda el derecho a participar en la vida cultural y científica. Protege la libertad creativa y su libre ejercicio, promueve el desarrollo y la divulgación del conocimiento, de las artes, las ciencias, la tecnología, el patrimonio cultural y asegura el acceso a los bienes y servicios culturales.
B) El Estado reconoce la función que este derecho cumple en la realización de la persona y en el desarrollo de la comunidad, promoviéndola a través de la colaboración del Estado y la sociedad civil.
C) El Estado promueve, fomenta y garantiza la relación armónica y el respeto de todas las manifestaciones de la cultura bajo los principios de colaboración e interculturalidad.
