Lamentablemente, hace pocas horas se confirmó la muerte de Francisca Sandoval, joven periodista independiente chilena proveniente de Canal 3 de La Victoria, que cubría los aconteceres ocurridos en el popular y reconocido barrio Meiggs, todo entre la escalada ola de violencia en la cual delitos como encerronas, portonazos, mafias estrechamente relacionadas con el narcotráfico, entre otras, son solo algunas de las situaciones de este climax de violencia que hoy se ha llevado a una profesional de las comunicaciones, todo a vista y paciencia de una indolencia sociocultural que pareciera haberse tomado el país. Pero los diagnósticos del estado (y la ausencia de Estado) están más que hechos, más que sabidos, por ende surge la siguiente pregunta: ¿Quién podrá defendernos?
En esta ocasión, me dirigiré en lo estrictamente comunicacional, en lo que ataña a los y las periodistas, pues, no solo en Chile un profesional de las comunicaciones muere, también lo hizo Shireen Abu Akleh, periodista palestina especializada en el conflicto de sometimiento que ejerce Israel sobre Palestina. Si bien situaciones como la de Francisca Sandoval o la líder de opinión palestina son hechos aislados – por el momento- en nuestro país, queda de manifiesto que, dada las circunstancias, la necesidad de contar no sólo con una reestructuración de las policías sino también con entes y organismos que protejan a la prensa, a los y las periodistas de hechos de violencia, de la precarización laboral y del constante desamparo que se vivió en el Estallido Social como el que, nuevamente, se ha estado viviendo hoy en día, y que probablemente se siga viviendo en Chile.
Dicho todo lo anterior, también es menester poder encontrar ciertas soluciones que permitan y faciliten trámites y diligencias que puedan ir, en ayuda directa, de los y las profesionales de las comunicaciones, entre ellas podemos mencionar las siguientes:
- Ley de Medios, que entre otras garantice ayuda legal, social y de salud
- Organización gremial: Una Asociación de Medios Independientes
- Un rol más activo del Colegio de Periodistas, sobre todo en la denuncia periodística y legal de los hechos.
- Procurar, como medios de comunicación, el abogar por la transformación social del país.
- Cuestionar, constante e incesantemente, las malas prácticas del poder y sus redes.
Si bien es efectivo que el país se encuentra en una crisis importante, también es cierto que aún estamos a tiempo de, desde diferentes espacios y trincheras, salir, unirnos y trabajar por una mejor convivencia, dejando atrás mezquindades y aprovechamientos sectoriales, pues, como dijo el Presidente de la República, Gabriel Boric “Cuando se ataca a la prensa está en peligro la democracia”. Y aún estamos a tiempo de salvar a la Democracia, no solo en forma sino también en espíritu.
Más columnas de opinión de La Máquina haciendo click acá.
