Gladiador 2 es una excelente secuela que supera por muy poco a su antecesora. Desarrolla muy bien la trama, la continuación y el legado que dejó Máximo.
Hablar sin spoilers sobre una película es un arte que no todos dominan, y menos cuando se trata de una de las cintas que más esperabas este mes y este año. Repetir el discurso “Mi nombre es Máximo Décimo Meridio, comandante de las tropas del norte, esposo de una esposa asesinada, padre de un hijo asesinado…”, creo que se entiende el punto al que quiero llegar.
Gladiador es una de mis películas favoritas, pero no dejaré que este fanatismo afecte una reseña bien hecha, con críticas y hechos concretos que puedan evaluar una producción como esta. Quiero agradecer a los amigos de Andes Films por invitarnos a ver Gladiador 2 en la sala IMAX de Cinépolis.
Por eso, en esta ocasión, Revista La Máquina te contará qué tal es la secuela más esperada del año.
La expectativa pudo matar a Gladiador II
Desde hace tiempo, dejé de ver tráilers de películas. Es una decisión totalmente personal; solo leo breves sinopsis de las cintas que me interesan mucho o planeo ver, así evito que la expectativa y el “hype” (expectativa) me sobrepasen.
Aunque el “hype” es un sentimiento hermoso, al menos cuando simplemente estás en ese eufórico momento, la expectativa muchas veces arruina el desenlace final, haciendo que la experiencia se vuelva tediosa, predecible y decepcionante. Afortunadamente, este no es el caso de Gladiador 2.
Es una secuela muy arriesgada, principalmente por el contexto de su cinta anterior y los 25 años que han pasado desde su estreno. Son unos zapatos muy grandes que llenar para una secuela que tomó tanto tiempo en llegar. Pero, satisfactoriamente, Gladiador 2 cumple e incluso diría que supera a la primera en algunos aspectos: el avance tecnológico es notorio y, junto con las grandes actuaciones, un guion sólido y una dirección impecable, estamos ante una de las cintas mejor valoradas del año.
Se repiten patrones en Gladiador 2
Objetivamente, Gladiador 2 es una excelente película. Entre la audiencia ya corre la voz, y un chisme viaja más rápido que la luz. Sin embargo, es justo criticar una cinta que en muchos aspectos imita a su antecesora.
Daré un ejemplo quizá absurdo, pero que tendrá sentido: Beetlejuice, Beetlejuice y Gladiador 2 siguen un patrón único y raro de ver dos veces. Ambas son secuelas de cintas estrenadas varias décadas atrás, que nos introducen con un recorrido por la película anterior, haciendo guiños y referencias casi calcadas de su predecesora. Obviamente, Beetlejuice, Beetlejuice y Gladiador 2 no se comparan en temática, aunque el paralelismo es evidente.
Con lo anteriormente dicho, sostengo que Gladiador 2 es una copia con más argumento en su esencia de lo que fue la primera. Esto plantea la pregunta: ¿qué película es mejor? En este caso, me arriesgo a decir que la segunda supera por muy poco a la primera, ya que mejora significativamente en el guion y en la representación del imperio romano.
¿Se puede llamar copia si imitas lo que ya has hecho en Gladiador 2?
Ridley Scott vuelve, después de experimentar con extraterrestres y Napoleón, para revivir una de sus cintas más icónicas. Y lo ha logrado, trayendo de vuelta una historia que quedó en la memoria de todos e inspirando a otros directores a explorar la antigüedad griega y romana en el cine.
Decir que esta secuela está a la altura de la primera es justo y necesario, puesto que el hecho de que Ridley Scott sea quien dirige de nuevo le da la oportunidad de tomar su obra ya completada y mejorarla. Aunque existen algunos hechos geográficos dudosos dentro de la cinta, como espectadores debemos aceptar que es parte de la ficción que da vida a la historia.
Desde la banda sonora, los montajes, las increíbles peleas y coreografías, todo nos deja inmersos en este mundo lleno de bestias, más que de hombres.
Los personajes aquí están muy bien dirigidos, y considero que el elenco es buenísimo, una sabia elección por parte del director. En escasas ocasiones, en el mundo actual, podemos encontrar un elenco joven y renovado que cumpla con tener grandes actuaciones tanto en solitario como en conjunto.
Una palabra: “icónicas”
El elenco de esta cinta es comparable a cuando Martin Scorsese reunió a todos los actores con los que trabajó a lo largo de su carrera para realizar El irlandés. Denzel Washington, Connie Nielsen, Pedro Pascal y Paul Mescal sostienen toda la cinta y su argumento; ¿cómo no hacerlo, siendo actores impecables? Aun así, no hay que olvidar a los secundarios, que también destacan cuando no vemos a los protagonistas en escena, robándose la cinta con su elocuencia y personalidad.
Si debo destacar a unos personajes secundarios, sería a Joseph Quinn y Fred Hechinger; Joseph quien interpreta a uno de los emperadores de Roma, trastornado y firme. Mientras que Fred es el más infantil e inexperto. Esta cinta maneja una gran cantidad de personajes, por lo cual es fácil destacar a quienes hacen más que solo permanecer en pie.
Los dioses han decidido…
Gladiador 2 es una excelente secuela que supera por muy poco a su antecesora. Desarrolla muy bien la trama, la continuación y el legado que dejó Máximo. Durando solo cinco minutos menos que la primera, se siente ligera y redonda. Un aspecto a criticar es su similitud con la anterior e incluso su tendencia a ser sobreexplicativa en algunos momentos.