20 años de “Vida de Perros” de Los Bunkers: Memorias personales de Francisco Durán y un fiel seguidor de la banda

A 20 años de Vida de Perros, Francisco Durán y un fiel seguidor de Los Bunkers cuentan a La Máquina cómo recuerdan las jornadas de grabación y cómo siente ese disco el día de hoy, a unas semanas para sus grandes shows en el Movistar Arena, el 7 y 8 de noviembre.

Veinte años han pasado desde el 2005, un año de cambios para un país muy distinto al que vivimos hoy. Ricardo Lagos presidía un Chile que buscaba reformar, aunque parcialmente, la Constitución heredada de la dictadura. Las primeras marchas estudiantiles se realizaban en contra del Crédito con Aval del Estado (CAE), entre paros y tomas en las universidades tradicionales. Una sociedad aún más desigual, con un crecimiento económico que profundizaba la brecha entre ricos y pobres, dejando una sensación de injusticia latente – aunque eso no es tan diferente hoy -.

Fue un año difícil. Un sismo de magnitud 7,9 Richter sacudió Tarapacá, dejando un saldo de 11 muertos, 100 heridos y miles de viviendas destruidas. Ese es el Chile que recordamos.

El Chile que vio ganar la presidencia a Michelle Bachelet. Para los futboleros, ese año los campeones fueron Unión Española y a la Católica, aunque, quizás lo más importante, es que se conoció a una de los máximos talentos salidos de las canchas nacionales y que sería el primer puntal de una nueva generación de futbolistas: Matias Fernández

“En lo personal, en el 2005 tenía 22 años y estaba metiéndome a mi segunda carrera. El contexto era muy distinto al actual, bastante optimista, especialmente entre los jóvenes, con respecto a la política y a los movimientos sociales. Hubo avances que no se reflejaron tanto en los 90 y que estallaron bien en los 2000. Yo en lo personal lo recuerdo con bastante cariño ese año. Y con la llegada del disco, más aún.”

Así lo recuerda Marcos González, creador de Almanaque Bunkero.

Mientras el país se debatía entre la esperanza y el desencanto, una generación encontraba su propia banda sonora. Fue en ese clima donde comenzó a gestarse Vida de Perros.

Portada de "Vida de Perros" de Los Bunkers.
Portada de “Vida de Perros” de Los Bunkers.

Camino hacia la casa de Nicanor

Al prender la radio – sí, en ese tiempo aún se escuchaba mucha radio – era común escuchar temas de Franz Ferdinand, quizás la banda más grande de esos años, o The Strokes, que el 24 de octubre (de ese año) dio su primer concierto en el país. A nivel nacional, La Ley anunció su separación y cerró su ciclo en el Festival de Viña, mientras que los Chancho en Piedra giraban con “Desde el Batiscafo”, Los Pettinellis también estaban de gira aún mostrando su disco debut y Los Prisioneros tuvieron su última presentación en marzo de ese año.

La salida de escena de Los Tres, La Ley y Los Prisioneros marcó el fin de una era. Lo que vino después fue una camada de bandas jóvenes que buscaba hacerse cargo de un escenario sin los viejos referentes.

Así es como, luego del disco La Culpa (2003), marcado por sonidos inspirados de “La Nueva Canción Chilena” e influenciado por la figura monumental de Violeta Parra, Los Bunkers buscaban volver a sus raíces. Más presencia de guitarras, grabar en cinta y volver, de cierta forma, a la esencia inicial de la banda

Sobre la grabación de Vida de Perros en la casa de Nicanor Parra, el querido guitarrista de Los Bunkers, Francisco Durán, habló con La Máquina y aprovechó de recordar:

“Yo creo que el entorno influyó mucho porque estábamos, como tú bien dices, en la casa de Nicanor Parra en Huechuraba. Esta era una casa bien campestre, un entorno muy natural, una casa hecha de adobe. A ese lugar decidimos llevar la consola, la máquina de cinta. Lugar muy pequeñito: había muy pocos lugares donde estar aparte de la sala de grabación y del control room. De hecho, la máquina de cinta la teníamos en el baño. (…) Estuvimos muy compenetrados, muy unidos durante la grabación, y como bien tú dices fue todo grabado muy en vivo. Entonces el disco se grabó como en dos semanas, si mal no recuerdo, jornadas intensas. (…) Una vez que ya obteníamos la toma de alguna canción, la escuchábamos y era como que ya estaba lista en términos sonoros. Después la mezcla se potenció, pero en general el sonido se obtenía de manera muy natural con la banda tocando ahí, en la sala de esta casa. Yo creo que influyó mucho el ambiente.”

Francisco Durán a 20 años del disco "Vida de Perros".
Francisco Durán a 20 años del disco “Vida de Perros”.

Si hay algo que definió Vida de Perros, es que incluyó canciones que, con el tiempo, se convirtieron en himnos coreados, no solo por sus fans, sino que muchas de ellas se han transformado en parte del cancionero colectivo. Un claro ejemplo de esto, es la canción “Llueve sobre la Ciudad”, compuesta y cantada por el mismo Francisco Durán:

“Ese tema fue uno de los últimos que se unió al grupo de canciones que estábamos grabando. Tenía la idea y la melodía rondando desde hace algunas semanas y yo quería que quedara en el disco, pero no había dado todavía con una letra que le hiciera justicia. (…) Y un día caminando por Santiago bajo la lluvia, comenzaron a aparecer las palabras. Al ser uno de los últimos temas en grabarse, como que no había mucho tiempo de que Álvaro la pudiera internalizar y por eso decidí cantarla yo. (…) Fue la primera vez que en el estudio empezamos a grabar una base sin tener terminada la canción. (…) Esa canción sí fue hecha más como por capas, pero tenía muy claro en mi cabeza lo que quería que hiciera el bajo y la guitarra. Y finalmente le pusimos la boya y terminó de tomar forma. (…) Fue la primera vez que le pedí a los chiquillos confiar en que arriba de esto iba a quedar algo bueno, porque generalmente nuestro criterio antes era tener la canción muy terminada antes de empezar a grabarla.”

Vida de Perros es un disco lleno de éxito y muchas canciones han cobrado mayor significado con el tiempo y otras que, incluso para la banda, han ido cobrando nuevo significado. Sobre esto, Durán nos menciona:

“Si, hay varias canciones del disco que han ido creciendo, por lo menos para mi, con el tiempo. Entre ellas, “Llueve sobre la ciudad”, “Nada es Igual”. Hay un tema que es un bonustrack que no está en el disco originalmente. Es como un track escondido que se llama “Dime Quién”. Ese tema me gusta mucho también. Y el tema que le da título al disco, Vida de Perros, también creo que es uno de los temas que están muy buenos. De hecho, lo tocamos cuando hicimos nuestros conciertos de reunión en Santa Laura. A pesar de ser un tema oscuro y todo, genera un momento muy lindo en Santa Laura.”

Respecto a reinterpretar el disco hoy, Durán es categórico:

“Creo que no vale la pena hacer ese tipo de ejercicios mentales porque si fuera por lo disconforme que a uno le deja un disco, es como que uno no lo termina nunca la verdad. Entonces como que somos más partidarios de ir cerrando etapas y pasar páginas y considerar que finalmente un disco es una fotografía de cierto momento que representa lo que la banda y los compositores están sintiendo durante esa época y ya está. Pero yo nunca grabaría un disco de nuevo, por lo mismo. Tampoco lo escucho mucho, uno no escucha los discos después de que lo hace porque lo escucha tanto mientras lo está trabajando que después uno no lo quiere escuchar nunca más. Aparte de estar tocando los temas en vivo y eso, no reinterpretaría ningún tema. Tal vez lo único es que a lo mejor algunos de esos temas que quedaron fuera, como el caso de “Dime Quién” sobre todo, me hubiera gustado que estuviera en el disco. Pero ya está.”

Impacto y legado de Vida de Perros

Vida de Perros se lanzó bajo el sello EMI Odeon Chile el 5 de septiembre del 2005, con una recepción positiva tanto de la crítica especializada como de los fans. Temas como Ven Aquí, Llueve Sobre la Ciudad, Ahora que no Estás, Miéntele, Te Vistes y te Vas se transformaron en himnos. El disco fue un éxito comercial y sonó en todas las radios nacionales y les abrió el camino internacional, llevando al grupo hasta México, haciendo que la banda compuesta por Álvaro, Mauricio, Francisco, Gonzalo y Mauricio Basualto se radicara en el país azteca. 

En un tiempo sin redes sociales, o al menos, no como las conocemos ahora, los fans tenían que ingeniárselas para saber en qué estaba la banda. Así es como Marcos González recuerda su primer contacto con el disco:

“No me enteré del lanzamiento de Vida de Perros al momento (…) sin embargo escuchaba radio y tuve el tino de escuchar el disco, me parece que la banda lo presentó canción a canción (…) No les puedo decir qué canción escuché primero, pero sí me quedó grabado Ven Aquí (…) Lo escuché casi íntegro en su momento, y encendí de inmediato con Vida de Perros (…) En la época de La Culpa no disfruté tanto, pero con Vida de Perros comencé a disfrutarlo y a sufrirlo también, desde el primer día.

A propósito de esto, Almanaque Bunkero nos cuenta cómo era ser fan de la banda, previo a las RR.SS. masivas:

“En lo personal, yo era un fan bastante periférico (…) compartía la música con algunos amigos, pero no participaba en fan clubs. Con suerte seguía el sitio web de Los Bunkers, que empezaba a levantarse fuerte para promocionar Vida de Perros. (…) Entiendo que muchos fans se organizaban a través de Fotolog, correos electrónicos y MSN, conformando núcleos para saber cuándo y dónde tocaba la banda. Había una mayor cercanía con Los Bunkers porque tenían menos equipo y el contacto era directo. También era la época de los afiches en la ciudad, que varios aún guardan como reliquias. Era otra forma de ser fan, muy distinta a la inmediatez de las redes sociales actuales.”

El 2005 fue un año de cambios y Vida de Perros musicalizó el proceso de un país en búsqueda de identidad. La misma identidad musical que Los Bunkers encontraron tanto en su sonido, letras y forma de crear, estableciéndose como referentes del rock chileno, abriéndoles paso en LATAM. Hoy la mística del disco sigue viva, sobre y abajo de los escenarios y allanó otro camino. Uno que llevó a la banda hacia el Barrio Estación.

También podría gustarte